Blogia
elsaltodelarana

unidos en la vía

Unidos en la vida. 

En el centro, cinco hombres... 

¡Y llena de gente!. Cuantas personas en ese ir y venir de allá para acá, de acá para allá, en un deambular. 
Es un río de seres y yo estoy en medio de la corriente, también soy un pez que ronda errabundo por las calles. 

Cinco hombres caminan entre el tumulto de la ciudad, caminan cogidos de la mano, del brazo, unidos a un lento caminar y en un mismo destino. Sus caras se ven resplandecientes. No ocultan malicia, ni pesares. Se notan frescos y hasta algo de felicidad se vislumbran en esos rostros. 

Caminan a través del desorden, entre los buhoneros y la gente, mucha gente por la vía, que pasa rauda sin mirar a nadie, reflejándose en sus rostros la ansiedad de las calles.. 

El escandaloso ruido. El ruidoso desorden, el alboroto de los sonidos; el equipo a todo volumen, en la venta de c.d., Los televisores proclamando las películas, el vendedor callejero que grita ofertando su mercancía, un pandemonium o un gran caos diario donde la personas se han acostumbrado a la habitual disparidad. 

Pero hay algo especial en esos cinco hombres, a uno pude verle lo ojos, claros y muertos, pero con un rostro hermoso lleno de paz y una sonrisa, franca y lozana. 

Iban imbuidos en si mismos, atados con el contacto de sus manos y del bastón, la guía de su caminar. 

Los cinco hombres estaban ciegos........... 

0 comentarios